sábado, 30 de agosto de 2014

Jugo de Melón


   Su degustación es uno de los agradables placeres del verano. Deleitarse con este jugoso fruto y fundirlo en la boca lentamente, mientras nuestras enzimas se mezclan con todas sus propiedades nutricionales que pasan a nuestro torrente sanguíneo.

Gozar de la sensualidad que nos ofrece esta fruta, bella, perfumada, dulce, sencilla, ingénua, suave... 

     El melón es originario del Asia Media y Africa tropical. Su pulpa es dulce y aromática. Está clasificada como fruta dulce y considerada por algunas culturas como "La obra maestra de Apolo" y benéfica como el propio sol.

     En las tumbas de los faraones egipcios, que datan de 2.400  años a.C.,  ya se encuentran pinturas de melones. 

     En 1583 apareció un tratado sobre el melón, escrito por Jacques Pons, director de la escuela de doctores de Lion, en el cual se enseñan 50 maneras de comer el melón. Contiene: agua (94%), proteínas, grasas, celulosa, prótidos, lípidos, glúcidos; vitaminas A, B1, B2, B5, B<, PP y C, fósforo, magnesio, sodio, azufre, cloro, calcio, hierro, potasio, ácido fólico. Cien (100) g de melón proporcionan 30 calorías, por tanto su poder energético es reducido.

     Es la fruta del aparato digestivo, con propiedades diuréticas, laxantes, estimulantes del apetito, mineralizantes y favorecedoras del buen estado de la piel.

      Una buena forma de tomar el melón es en jugo, con piel o sólo la pulpa.